Un plato dificilísimo: arroz frito al estilo coreano. Una preparación que nació después que el arroz frito chino o el omurice japonés. Una receta muy sencilla en cuya base se encuentra un bap (arroz) y kimchi. Se comienza sarteneando cebolla de verdeo y ajo, después se añade el kimchi. El sabor del fermentado se suaviza con el calor y una cucharada de Gochujang con salsa de soja lo levanta. El arroz hervido era, como corresponde, del día anterior.
Me han contado que en los lugares de Seúl donde venden este plato uno puede agregar cosas ricas por un plus de dinero (verduras, panceta, langostinos, etc.). No quise ser menos y de puro caprichoso añadí un huevo frito y otro estrellado.