Chung Hwa Ru es un restaurante en el Pasaje Valle. Una cortada fantasmal que desde Argerich al 561 penetra en la manzana sin llegar a tocar Nazca. Si uno busca esa calle en Google Maps no encuentra más que una tenue línea. El buscador no logra ubicar la dirección, pero tampoco niega su existencia

En esa vía corta, de unos 40 metros, con piso de cemento y ligeramente inclinada, hay varios restaurantes. Algunos de ellos han sobrevivido a la pandemia y otros permanecen en pie, pero inactivos, a la espera de nuevos dueños. Chung Hwa Ru es un lugar modesto, de escasas mesas y tiene en su carta varias versiones de esos fideos de trigo con una salsa espesa de porotos negros caramelizados con carne de cerdo y verdura que son muy populares en Corea y también en el barrio. Aquí se los conoce como chachagmyun pero en la web se los llama jjajangmyun. No es uno de mis platos favoritos de la cocina coreana, pero no era una mala versión.

El arroz blanco con verduras y calamar en salsa picante cumplía con la promesa del mordiente, era sabroso y muy abundante. Las muy buenas empanadas fritas de cerdo y verduras fueron lo mejor de la manduca. Eran sabrosas, con una buena fritura, no eran gomosas y la nira añadía frescor y color al bocado. Las mojamos con una mezcla que preparamos en la mesa con salsa de soja, vinagre y gochugaru.

Muy buena atención. Pesos 1100 por personas con una cerveza de litro. Los precios del menú que adjunto son viejos, el arroz con verduras cuesta 800 y no 600. Las porciones son generosas, aptas para compartir.